¡Bienvenida, #primavera! Una de mis estaciones favoritas por el cambio tan brusco que hay del #invierno en cuanto a diseño se refiere: nuevas tendencias, materiales, textiles, colores…pasamos de comer con la chimenea puesta a empezar a disfrutar de una buena comida con sol y al aire libre. Eso también se ve reflejado en los menús y tipo de comidas que preparamos. Todo está conectado.

Hoy os traigo uno de mis post favoritos del #blog, dentro de posibles ideas de decoración: cómo vestir una mesa primaveral y cuáles son las tendencias para este 2021.

Para esta #primavera, hay tres tendencias de mantelería que no pueden faltar a la hora de montar tu mesa:

1. Como es de esperar, el estampado floral no falla. Manteles de algodón sobre un fondo crema o beige y flores con un aire campestre.                                                  

2. El ‘vichy’ ha venido para quedarse. El año pasado ya fue un estampado en moda muy tendencia y en decoración de mesas para esta primavera es un ‘must’. Cuadro grande o pequeño, blanco y negro o de colores, con servilletas a juego o lisas…lo pongas como lo pongas, quedará genial.

3. Los lisos nunca fallan. Tanto linos como algodón, con colores un poco más eléctricos: azul, amarillo, verde…con un estampado Jacquard vegetal o alguna raya muy sutil. Se pueden combinar con alguna vajilla más estampada.

En cuanto a colores, todos los que den luz valen a la hora de montar una mesa primaveral. Pero los que más predominan siempre son:

1. Verde y rosa. Ambos mezclados con vajillas con estampados florales, detalles de hojas, centros de mesas con plantas y siempre toques de rafia o madera para aportar un poco de robustez y que no cargue tanto.

2. Colores neutros: blanco y beige. Para hacer una mesa un poco más sencilla. Sobre un mantel de lino tostado o beige con unas servilletas blancas con vajilla de loza del mismo color. Puedes utilizar individuales para que se vea la mesa y poner un buen centro de flores par dar ese toque de color.

3. Morado en todas sus tonalidades. Es cierto que es un color que en decoración no suele gustar mucho, aunque ahora está más de moda tanto a la hora de vestir como en interiorismo. Me gusta mucho utilizarlo en cristalería, vajilla y, por supuesto, como centro de mesa con algunas flores.

Y para elementos decorativos, podemos buscar piezas más concretas de la estación para dar ese toque especial.